Hablar de don Roy es hablar de una persona que ha dejado y sigue dejando huella en la historia del Club.

El Club de Futbol Monterrey agradece a don Rogelio Vidal Salinas por su incansable entrega y años de servicio en beneficio de los jóvenes de las Fuerzas Básicas de la Institución.

Desde el inicio de la década de los 90 y hasta hoy, don Roy ha recibido y acompañado en su formación a más de 2 mil jóvenes que han llegado a la ciudad llenos de sueños e ilusiones, al albergarlos en su hogar, el cual ha ofrecido como Casa Club.

Pasan por su casa alrededor de 70 jugadores cada año. Unos 22 viven de forma fija durante el año, y con el paso de los meses van llegando nuevos jóvenes que buscan probarse para obtener un lugar en las Fuerzas Básicas de la Institución.

Antonio Naelson “Sinha”, Luis Cárdenas, Jesús “Tecatito” Corona, Antonio Mohamed, Guillermo Madrigal, Edson Reséndez y Sergio “Alvin” Pérez son algunos de jugadores y ex-jugadores que han pasado por la casa de don Roy, y que hasta la fecha conservan una amistad con él.

Nicolás Martellotto, director de Fuerzas Básicas del Club de Futbol Monterrey, reconoció en una visita reciente la labor de don Rogelio Vidal Salinas.

"Don Roy es un ser humano que ha marcado la vida de muchos jóvenes de las Fuerzas Básicas de Rayados. No solo ha estado presente en su educación, sino en la orientación de vida, deporte y estudios. Él y su esposa desempeñan una labor muy importante desde el punto de vista familiar, formativo y educativo", comentó.

Luis Cárdenas, jugador de los Rayados, se mostró agradecido durante la visita por la labor hecha por don Roy durante décadas en el Club.

"Siempre agradeceré esta noble labor que él y su familia tienen con los jóvenes que llegan a la Institución. Llegan en la etapa más difícil, entre los 11 y 14 años, lejos de tu familia, y te hacen sentir como en casa", dijo Cárdenas.

Jesús "Tecatito" Corona, quien también vivió con don Roy en su etapa en las Fuerzas Básicas y acudió a la visita, dijo estar agradecido por su aportación a la formación de los jóvenes y por el reconocimiento de la Institución a su trayectoria.

"Estoy feliz por lo que ha logrado y lo que ha hecho. No tengo más que palabras de agradecimiento para él y su familia. La educación que me dieron es el recuerdo más bonito que tengo", enfatizó.

Tras recibir la visita y el reconocimiento de los integrantes del Club, don Roy manifestó su agradecimiento y su deseo de seguir con esta importante labor.

"Aquí estamos trabajando. No tengo palabras para darles las gracias a ustedes. Seguimos al pie del cañón”, expresó.

¡Gracias, don Roy, por su incansable entrega y sus años de servicio en beneficio de los jóvenes del Club!

Andrés Jiménez